Las criptomonedas son un concepto relativamente para el mundo, pero las grandes instituciones financieras han tomado en serio sus aplicaciones desde hace mucho tiempo. La filosofía central detrás de la creación del bitcóin fue de desvincular la oferta y el precio de la divisas digitales del control de los grandes bancos y ponerlos en las manos de las personas. Sin embargo, a medida que los gigantes de la industria comienzan a explorar con sus propias criptomonedas estables, la amenaza de los conglomerados centralizados que gobiernan el mundo está más cerca que nunca.
Gobiernos centrales con intención de digitalizar sus divisas
Uno de los grandes rivales de las criptomonedas controladas por la comunidad sería la introducción de divisas electrónicas emitidas por gobiernos centrales. Los países que están más cerca de digitalizar completamente sus sistemas monetarios —para la fecha de edición— son China y Suecia.
Este último ha visto una fuerte disminución en el uso de dinero metálico durante los últimos años. El Riksbank, el banco central sueco, ya está explorando formas de introducir la e-corona. La divisa fíat completamente digital será diseñada para trabajar exactamente de la misma manera en que lo hace la corona sueca real y podrá ser usada para pagos cotidianos, independientemente de sus dimensiones.
Suecia no está sola en la búsqueda de un avance tecnológico al dinero nacional. El Banco de Israel, el Banco de Canadá y —por supuesto— el Banco de Inglaterra han invertido enormes cantidades de dinero para que grandes equipos de trabajo analicen las implicaciones de introducir dinero electrónico en los próximos años. Estos grupos finalmente evaluarán la utilidad y la demanda de una economía completamente digital, además de presentar una transición simple desde el statu quo.
¿Empoderamiento económico?
Pero ¿qué significa esto para nuestro empoderamiento económico? Los bancos centrales por mucho tiempo han controlado los sistemas financieros y, en consecuencia, han determinado cuál es el valor del dinero. Para ponerlo de otra manera, te pagan por tus destrezas, tu energía y, finalmente, por tu tiempo. Cuando un banco central decide ‘bombear’ la moneda local imprimiendo dinero, el valor de la divisa disminuye. Esto significa que han determinado que tu tiempo y esfuerzo vale menos que ayer.
Para los entusiastas de las criptomonedas, estos desarrollos son extremadamente preocupantes. Estos sistemas utilizarían la innovación ofrecida por bitcóin, deformando su diseño lo suficiente como para despojarlo de todo lo que representaba.
Las decisiones de los gobiernos más poderosos siguen teniendo una drástica influencia en el precio del bitcóin y las altcoins como Ethereum, Dash y Cardano. Recientemente, después de Corea del Sur simplemente asomara la posibilidad de prohibir las operaciones de los exhchanges de criptomonedas, el precio del Bitcoin se desplomó hasta en 25 %.
Desafortunadamente, las noticias globales y económicas de este tipo solo sirven para aumentar la volatilidad en un mercado que ya es volátil de por sí, ya que refuerzan los argumentos de los grandes bancos. Esto es: instituciones con una agenda para retener el control de la riqueza mundial y así, estar posicionadas para dictar políticas sociales, políticas y financieras.
